Fue un apoyo cuando en una etapa de mi vida sentí que me desmoronaba, que ya no podía más, venía de mucha crisis en el pasado como persona y sus palabras muchas veces proporcionaron el aliento necesario para reconciliar mi autoestima como madre, como mujer; entre ejercicio y ejercicio, disciplinas como ella les dice, me llevaba a analizar que todo en mi era valioso, que todo tenía una razón para hacerme mejor, que tenía demasiado para inyectarle al rumbo que en mi vida veía lejos;  siempre motivando, esperando hasta verme convencida, hoy, gracias a que en parte decidí alejarme de todo lo que no me recordaba lo maravillosa que sigo siendo, a que me guio a confiar y tener fe en El personaje principal de sus historias, decidí apostar por mí y mi primer gran paso ha sido estar viviendo en otro País; dice ella que aún tengo asuntos por cicatrizar, pero que gracias a esa verdad, estaré andando pasito a paso por el camino que me sigue llevando a vivir una vida más sana. Gracias Alexa, siento que seguirás estando ahí a pesar de todo.